El pasado 22 de octubre, una publicación en X (ex Twitter) del director ejecutivo de América Transparente, Juan José Lyon, generó gran conversación en torno a un caso de trato directo por $20 millones detectado en la Corporación de Desarrollo de La Reina.

Todo comenzó cuando Lyon decidió probar el nuevo buscador de órdenes de compra del portal de ChileCompra. En menos de dos minutos encontró una contratación directa por servicios de banquetería para un evento municipal, autorizada bajo la causal de “urgencia, emergencia o imprevisto”.

La particularidad: el Día del Profesor es un evento anual y previsible, y (según los antecedentes publicados) el mismo proveedor habría sido contratado de forma directa en fechas similares en años anteriores. ¿Se ajusta eso al estándar de “urgencia”? ¡Veámoslo!

¿Cómo se detectó la irregularidad de trato directo?

1. Ingresó al buscador de órdenes de compra y filtró por “Corporación de Desarrollo de La Reina”, ya que las corporaciones suelen concentrar más recursos que las unidades municipales.
2. Ajustó el rango de fechas a todo el año y filtró por “trato directo”, mecanismo donde históricamente se han detectado más irregularidades.
3. Encontró una orden por $20.682.200 en servicios de banquetería, adjudicada directamente.
4. Al revisar los documentos adjuntos, comprobó que se justificaba como “imprevisto”, lo que contradice la naturaleza recurrente del evento.
5. Finalmente, hizo una búsqueda inversa por proveedor y constató que la misma empresa ha recibido este trato directo todos los años, en la misma fecha.

¿Cuándo procede el trato directo por “urgencia/imprevisto”?

El trato directo es excepcional y exige fundamentación. La causal de “urgencia, emergencia o imprevisto” se entiende para situaciones sobrevinientes que impiden licitar sin afectar el interés público (p. ej., emergencias, desastres, fallas críticas). En cambio, los eventos periódicos o planificables (como aniversarios institucionales o fechas fijas) no suelen calzar con esa causal: se espera que se liciten con anticipación.

Por eso, invocar urgencia por falta de planificación o por actividades recurrentes suele ser problemático y puede derivar en reparos y sanciones administrativas. La esencia es simple: si puedo anticipar la necesidad, debo planificar y licitar.

¿Por qué este caso de trato directo es relevante?

Los tratos directos están permitidos solo en casos específicos y deben ser excepcionales. En este caso, el uso reiterado de esta modalidad para un evento planificable podría constituir una infracción a la Ley de Compras Públicas.

Además, el caso evidencia lo sencillo que resulta hoy fiscalizar desde la ciudadanía, utilizando herramientas abiertas como el buscador de órdenes de compra de ChileCompra. Lo que antes requería tiempo y conocimiento técnico, hoy puede detectarse en minutos.

Señales de alerta al revisar tratos directos

• Causal invocada: ¿“urgencia” para un servicio que ocurre todos los años?
• Reiteración: ¿mismo proveedor, misma fecha, misma modalidad, varios años?
• Documentos adjuntos: ¿la justificación describe un imprevisto real o una actividad previsible?
• Temporalidad: ¿hubo tiempo razonable para licitar?
• Comparables: ¿existen licitaciones similares en otros organismos para el mismo tipo de evento?

En resumen

La transparencia abre la puerta, pero la estrategia te hace entrar. Si quieres competir de verdad en Mercado Público, necesitas foco: qué organismos compran, cuándo compran y cómo se mueven. En LicitaLAB te ayudamos a encontrar oportunidades, activar alertas de licitaciones y Compra Ágil, y ordenar tu estrategia comercial. Anticípate, llega mejor preparado y multiplica tus adjudicaciones.

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